miércoles, 6 de julio de 2011

Y que arda Paris...

Queridita mandorla repleta de chuches y nubes de golosina empochadas en almíbar,
Una cosa te voy a decir y que te quede bien clarita:
El día que sueñe contigo arde París, arde Troya y de nosotros no queda ni el rastro porque nos fundimos en nuestro propio fuego cual pareja de amantes de Pompeya.
Aclarado el tema, sigo con lo mío.
No puedo creerme que un caramelo informativo como lo de Teddy Bautista haciendo de Judas en la mismísima SGAE no haya sido utilizado ya en algún medio (o quizás sí, y yo no me he enterado).
Respecto al nombre del blog, fíjate cómo es la vida, que hace años nos hubiéramos escrito cartas que guardaríamos en una caja de zapatos. De ahí podrían pasar en versión corregida y menguada a manuscrito o bloc (bloc-blog todo vuelve) y una vez publicado lo llamarían género epistolar. Ahora ciber epistolar. Tú ponle a todo ciber delante y quedas estupendamente. Ciber sexo parece lo más y no deja de ser el onanismo de toda la vida disfrazado de modernidad, de una comodidad perezosa y pochado de interferencias y saltos espacio temporales que nos evocan primeros pasos del Hombre en la Luna. Una pequeña mancha en la pantalla, un paso extraño para la Humanidad.
Propongo en nuestro blog, que aparte de desfogarnos, mimarnos y vivenciarnos, nos ayudemos y ayudemos a quién quiera leernos. Tenemos profesiones perfectas para ello.
Dado que lo de ciber, es una solemne estupidez, seguiré pensando un nombre, soñando contigo y esperando tu email, que quieras que no, hace que la semana sea, si no más corta, más bonita y fácil de llevar.
Te quiere,
Johnny  

1 comentario:

  1. Reconozco que vuestros almibarados nombres me están empezando a hacer reír bastante, je, je. Cada vez son más imaginativos.

    Un besote,

    David

    ResponderEliminar