Esto no es un adiós, es un ¡Hasta pronto!

Querida amiga del alma Ester,

Tu curriculum de la Seguridad Social es más completo que el delictivo de la cúpula del PP valenciano y madrileño juntos: epicondilitis, cervicalitis, lumbaritis, artrositis,...




He meditado sobre lo que hablamos el otro día en  L´Arboç y en la Calçotada de Can Cabanyes...
Llevamos 5 años escribiéndonos. He tenido la oportunidad de releer algunos e mails y estoy orgulloso del trabajo que hemos hecho. Sí, ya sé que no está bien que yo lo diga pero, hija, no puedo remediarlo.
Lo que también he observado es que en tanto tiempo muchos temas (a veces sin darnos cuenta) se repiten (sobretodo yo, que soy el desmemoriado) y sobre todo me he dado cuenta de que con los años nos cuesta más escribirnos: nos demoramos más en el tiempo. Seguramente no por no tener nada que decirnos sino porque tocamos muchas teclas.

Tras estos cinco años guardando e mails por si finalmente decidiamos montar un blog con ellos, comprendo que la idea es quizás la más absurda que hemos tenido. Menos mal que no lo hemos hecho. Francamente, me da miedo la idea de que tanta intimidad se ponga al descubierto con lo difícil que es luego eliminar cualquier dato estúpido que uno haya colgado en internet en un momento de incontinencia blogera.

En nuestra última quedada (¡que bonita la Giraldilla!) los dos estabamos de acuerdo en que hacer un blog de esto es un proyecto poco apetecible.

Dicho esto, ¿que tal si reservamos el mail para temas muy largos y continuamos con wasup y llamadas cuando estamos lejos y quedadas cuando estamos cerca? el mail definitivamente ha muerto.

¿que te parece? nos decimos adiós de manera epistolar (ciberepistolar o como se diga) y nos decimos hola a escribir una obra de teatro a cuatro manos, una posible paternidad por mi parte y una más que consolidada maternidad por la tuya; podemos seguir diciendo hola a grabar gags de humor, pequeños cortometrajes con un presupuesto de dos euros,ponernos una peluca y cantar... hay tantos holas que decirle adiós al mail me parece el paso más natural.

En fin...te dejo ya.

xx

Johnny

PD: Me has dicho muchas veces que no sabías en qué punto de nuestra correspondencia podías encajar el poema de Oscar Hahn. Yo lo hubiese metido en todos los impases de espera de tus cartas. Que gozada, éstas, para todos mis sentidos. No puedo sino agradecerte estos años de confidencias, de complicidades, de reirnos de todo y de nosotros mismos, de compartir, de sufrir, de esperar tu e mail con la ansiedad del protagonista del poema... También todo se acaba para él. Será un paso atrás para reinventarse y tirar `pa alante´con más fuerza que nunca. No es un adiós, es un ¡hasta pronto!

Esperando tu mail - Oscar Hahn

Abrir mi correo
en el computador
esperando encontrar
un email tuyo
y no encontrarlo
abrirlo cada día
cada hora
cada minuto
y no encontrarlo
y tener miedo
de mirar mi correo
y pasar los ojos
por cada mensaje
buscando el tuyo
y no encontrarlo
y estar a punto
de romper la pantalla
de un puñetazo
y no encontrarlo
pero abrirlo de nuevo
y de repente
ver tu nombre
y leer el texto
aguantando apenas
la respiración
y llegar temblando
a la última linea
a la última palabra
y no querer respirar
nunca más en la vida
y querer caer muerto
encima del teclado.