domingo, 27 de noviembre de 2011

The music of the night...

Mi queridísimo irish coffe con dos bomboncitos de chocolate negro, ahí, justo al ladito,
Si hay algo que salvó el 20- N sin duda fue vuestra puesta en escena de Wilde al que siempre le agradeceré que le diera por escribir y compartir con el mundo lo que de su cabecita salía.
Te diría que no me creo que  a la 1:30 de la madrugada estuvieses recogidito en tu casa, pero no nos engañemos, los años pasan para todos y me lo creo.
Puedes estar tranquilo por mis hijos, a día de hoy no he conseguido hacer con mis manos ni una sola prenda que sea llevable en público, aunque, agradecidos como son los dos, se las ponen para jugar en casa… hay una especie de chaleco que Oriol dice que es perfecto para hacer de forajido y como Anna esta en edad de imitar, a ella le parece que vestirse de forajida es lo más. Yo por mi parte me estoy planteando si vale la pena que siga perdiendo tiempo y dinero en tratar de hacer un jersey, cuando en el H&M los venden hechos.
Supongo que ya lo sabes, pero que sepas que Michael Crawford, el mítico y torpón Frank Spencer, protagonista de la serie de la que  hablas, es también el brillante interprete de El Fantasma de la opera y tiene en su currículum un a mítica escena en Hello Dolly que es a su vez, la que contempla Wall-E fascinado en el film de Pixar.
Eso y comentarte por, si no te lo he dicho alguna vez, que “La fiera de mi niña” es una de mis películas favoritas; esta y “¿Qué me pasa, doctor?”, que curiosamente ambas son versiones libres de “La fierecilla domada” de Shakespeare. Con estas dos pelis y un Martini, no hay depresión pos electoral que pueda conmigo.
Aquí te adjunto a Michael Crawford por si nunca te has parado a escuchar esta deliciosa canción interpretada por él.
Y recuerda:
Todo te lo puedo dar menos el amor… baby…
¡Besitos!
Esteruqui.