viernes, 24 de julio de 2015

Bye bye sonrisa metálica 2º parte


 Hola vichysoise fresquita con virutas de parmesano, sólo un apunte más. 
Ayer volví a la dentista a recoger mis cedulas. Durante quince días debo llevar día y noche unas fundas transparentes que han hecho a partir de un molde de mis dientes. La pasta que usan para hacer el molde es como un chicle gigante que me produjo arcadas. Tuve que utilizar mis escasos conocimientos de yoga para concentrarme en mi respiración y no potar allí mismo. Pues bien, los plásticos de los cojones no son mejores que eso. Cada dos por tres me viene una arcada y sólo le pido al dios de los agnósticos que esto acabe pronto. Sólo me los quito para comer y lavarme los dientes y te aseguro que ver mi cara mientras procedo es un poema.
Creo que el proceso no termina en estos quince días, se supone que después viene por fin una pieza fija que pondrán por dentro para usar forever and ever.
Y para que no creas que sólo hablo de mí, te cometo que Anna tiene un resfriado de esos de mocos y fiebre. Pobrecita, con este calor tener fiebre es lo peor, la tengo a base de polos de hielo para que se refresque un poco. Espero que se le pase pronto.
Ya está. De nuevo no tengo nada más que decir. Hace calor y sudar tanto me da un poco de asco. Marta me hizo una foto en la terraza y estoy brillante y no es precisamente mi agudeza literaria lo que reluce. Es la mierda de sudor que me baña todo el cuerpo y me deja agotada.
A ver si nieva de una vez…

¡Besitos!
Esteruqui

No hay comentarios:

Publicar un comentario